Tercer partido perdido en la temporada y contra el mismo rival que nos venció en la ida.

Un equipo con un nivel bastante superior a esta categoría, que ha jugado muy bien, gestionando ataques largos y llevando desde el principio el ritmo de partido.

Como análisis rápido y a primera vista, sólo hay que fijarse en el marcador para saber cuál ha sido nuestro talón de aquiles.

Llevamos una media de 32-33 goles por partido e incluso superior en momentos puntuales. Hoy nos hemos quedado en 22!!.

Nuestro porcentaje de efectividad ha sido espantoso. Nuestros lanzamientos han sido muchas veces precipitados y nos hemos estrellado una y otra vez contra sus porteros.

El ansia de intentar despegarnos o alcanzar al rival en el marcador –dado que hemos ido igualados el 95 % del partido- provocaban los ataques fallidos y precipitados. No hemos mandado en el marcador en ningún momento.

Sólo se ha visto la intensidad que nos caracteriza en defensa en los últimos 6-7 minutos finales en una defensa individual a medio campo que nos ha permitido remontar dos goles, pero insuficientes para llevarnos el partido.

En fin. Hemos tenido un mal día. Hemos perdido  y ha de servirnos de lección. Seguimos líderes y hemos de volver a nuestro juego habitual. Que sólo sea una anécdota.